"Encuentro" es el término que refleja lo sucedido en el gran evento
Educared 2011.La variedad de actividades, de modalidades de presentación de las experiencias, los ponentes, los participantes presenciales y virtuales tod@s conformaron un universo enriquecido de experiencias de aprendizajes. Nos resultó de gran agrado poder vivir un encuentro virtual y presencial en el que se estimuló en todo momento la práctica de la actitud 2.0 a través de la participación activa de todos los interesados en las temáticas tratadas y las actividades realizadas.
El congreso bianual de Educared 2011, se puede describir como un evento multidireccional, en el que se pudo tomar y compartir los conocimientos de acuerdo a los centros de interés de todos los que hicieron vida en el mismo. Un encuentro en el que se pudo vivenciar la cultura digital, la cual, tal como lo expresaron los especialistas, trasciende la tecnología misma para imponer una manera de interactuar. En este proactivo ambiente, la libertad, la creatividad y la expresión de los pensamientos y sentimientos se hizo con naturalidad.
Se podría pensar que Educared se restringe al ámbito educativo específicamente, no obstante todos los
agentes sociales que se sienten responsables con su entorno y quieren asumir el liderazgo transformacional que exige el mundo actual han podido y pueden participar en los debates abiertos que se han planteado. Todas las instituciones, entidades y empresas de servicios relacionadas con la formación han podido participar, aportar, compartir. La constitución de una comunidad y las sinergias iniciadas en el encuentro pueden perdurar por vía de los espacios web creados, los grupos, el portal del encuentro y por las redes sociales.
Con el temor de dejar por fuera aspectos importantes, pero con la humildad de sabernos solo una parte de los procesos y eventos sociales en los que participamos, queremos sintetizar las temáticas abordadas en el
#FT_EIE11 en cuatro grandes áreas: a) la focalización en las nuevas maneras de formar, la necesidad del cultivo y desarrollo del talento; b) la revuelta socio-institucional en las instituciones de educación formal; c) el despliegue, definición y caracterización de la cultura digital; y d) el protagonismo social como nuevo fenómeno del mundo hiperconectado.
La necesidad de rescatar a toda una generación de jóvenes talentos que se encuentran en situación de desesperanza, desaliento y con pocas oportunidades de desarrollo, motiva a focalizar la atención en ellos como fuentes de reactivación de la economía. Se han desarrollado iniciativas de análisis de la situación nacional en cuanto a índices de desarrollo y calidad de vida y se plantea la urgente necesidad de retomar las fuerzas vivas, fortalecer la capacitación y abrir opciones de participación. Con esto se espera construir alternativas de acción para delinear soluciones viables enriquecidas con los aportes de los que están más afectados por los cambios en las estructuras tradicionales y de quienes se exige mayor compromiso. La invitación está abierta para que tod@s colaboremos con ideas y propuestas.
Las instituciones de educación formal viven momentos muy especiales que podríamos escenificar como el paisaje de un tornado con menor velocidad e intensidad que uno real. Son muchas las escuelas y colegios que se han visto inundadas de conexiones, equipos tecnológicos, cursos de preparación, impulso de iniciativas en el aula que una vez tomadas, una vez lograda la inmersión en el aspecto tecnológico en combinación con los pedagógicos y didácticos han dejado un efecto de transformación de las actividades y de las modalidades de enseñanza y aprendizaje. No obstante son muchos aún los colegios, escuelas e instituciones de educación formal que se han visto poco afectadas - como las casas que quedan al lado del tornado- por la transformación y que aún perpetúan modelos tradicionales de enseñanza y educación incluso empleando las actuales tecnologías.
La cultura digital y su caracterización nos conlleva a la reflexión sobre las prácticas profesionales, sociales, formativas, personales, comerciales y hasta espirituales. Se delata un proceso complejo que arropa la manera de ser. El actual estilo de interactuar, de relacionarnos, de aprender, de solucionar los problemas y tomar decisiones está teñido por la impronta del conectivismo social por un lado, pero por otro, por la desregularización de todos los procesos: los formativos, educativos, económicos, sociales, sanitarios, cognitivos, emocionales, comunicacionales. De manera que se convive en diversos círculos, conglomerados o mundillos que constituyen una galaxia social multivariada, compleja, hiperconectada y en transformación constante.
Una vez superado el problema de la conectividad, el protagonismo social es lo que se impone. Ya no son solo los "expertos" los que exponen sus ideas, es la gente común, las personas que se atreven a expresarse, las que se atreven a opinar, a criticar, a ofrecer lo que se saben, los que emprenden, los que innovan...Tod@s son / somos coparticipes en la creación de la actual sociedad digital.
He allí uno de los mayores retos que se requiere superar:
- El acceso a la conectividad, en primer lugar. Una vez en la red, las posibilidades son inmensas, las opciones son múltiples, los aprendizajes no tienen límites.
- Ampliar los círculos de influencia en los entornos formativos para que las oportunidades de desarrollo y crecimiento llegue a más gente y de mejor manera, más actual.
- Estimular a las nuevas iniciativas emprendedoras que contribuyan a mejorar la calidad de vida y a convivir en un mundo mejor.
En definitiva, este IV Encuentro Internacional Educared 2011, fue y es un espacio que invita a la reflexión sobre la importancia de la participación de cada persona como agente de cambio de la sociedad que se desea tener. El desarrollo de la tecnología y del conocimiento como producto de las pequeñas, medianas y grandes contribuciones de cada época anterior, de cada fragmento de la historia, y que cada individuo aportó nos ha permitido llegar dónde estamos. De esa misma manera estamos colaborando con la construcción del mundo inmediato y del futuro pero con una mayor celeridad, por la velocidad que ahora imprimen los medios de los que disponemos. La multiplicación exponencial de la información que tenemos a la vuelta de un “clic” abre caminos para algunos y brechas para otros. Es parte de la complejidad y también de la fascinación que nos impone la realidad que vivimos. Es allí donde debemos actuar.